Un gol de Gonzalo Asensio en el último segundo desató la locura en el feudo galdense.
El Polideportivo Juan Vega Mateos vivió una de esas noches que quedarán grabadas en la memoria de la afición galdense. El Balonmano Gáldar Gran Canaria se impuso por la mínima al Luceros gracias a un gol agónico de Gonzalo Asensio sobre la bocina, culminando un encuentro de emociones fuertes y un final digno de película.
Desde el inicio, los de Aday Sánchez salieron con la intensidad que los caracteriza en casa. Una defensa sólida, comandada por Guillermo Arencibia y Álvaro Díaz en el centro, desactivó durante muchos minutos las ofensivas del cuadro gallego. En ataque, jugadores como Jesús Mendoza y Marvyn Santiago marcaron el ritmo, mostrando efectividad y velocidad en las transiciones, lo que permitió a los locales marcharse al descanso con una ligera pero merecida ventaja (17-15)
Sin embargo, la segunda mitad fue diferente. Los errores de lanzamiento y algunos desajustes defensivos del Gáldar dieron alas a un Luceros que nunca bajó los brazos. El acierto desde los siete metros de Ale Castellano mantenía a los visitantes en el partido, mientras el nerviosismo se apoderaba del conjunto local. A falta de cinco minutos, el marcador reflejaba una desventaja de dos goles para los galdenses, y el Juan Vega Mateos contenía la respiración.
Fue entonces cuando emergió la figura de Cayetano González. El central firmó una segunda parte para enmarcar, con siete goles y una recuperación clave en los compases finales que devolvieron la esperanza al Gáldar. Su entrega contagió al equipo y a la grada, que empujó con fuerza hasta el último segundo.
Con el tiempo prácticamente cumplido y el marcador igualado, el Gáldar dispuso de un último golpe franco. Guillermo Arencibia sirvió el balón a Gonzalo Asensio, quien, con un lanzamiento seco y raso, logró batir al guardameta gallego por debajo de las piernas para sellar una victoria épica (31-30). El pabellón estalló en un grito unánime de alegría, celebrando un triunfo tan sufrido como valioso.
Pese a los errores cometidos en la segunda mitad, el conjunto de Aday Sánchez demostró carácter, fe y espíritu competitivo para doblegar a un rival que venía en racha. Esta victoria supone un importante impulso anímico antes del próximo compromiso liguero, en el que los galdenses viajarán a tierras gallegas para medirse al Reconquista de Vigo, que llega tras caer ante el Tacoronte en Tenerife. Un nuevo reto en el horizonte para un Gáldar que sigue creciendo y soñando con estar entre los mejores.